SER MADRE NO SIGNIFICA DEJAR DE SER MUJER BELLA

Por: Patricia Mérida. 


¿Por qué algunas mujeres piensan que una parte de sus vidas muere cuando se convierten en madres? ¿Por qué tienen que pasar a segundo plano como personas? ¿Por qué tenemos que dejar de ser mujeres para ser madres?

A pesar de que toda nuestra atención y gran parte de nuestro tiempo lo absorba ahora nuestro bebe, no debemos de dejar de hacer lo que nos gusta, lo que nos apasiona, lo que realmente disfrutamos hacer, habrán espacios que nos permitirán hacer esas cosas que nos hacen sentir vivas.

Es cierto que nuestros hijos nos necesitan, necesitan de toda nuestra atención, de ser protegido, cuidados, escuchados, amados, ser tratados con cariño y respeto, somos un ejemplo a seguir para ellos, por eso debemos saber guiarlos con madurez y responsabilidad, estamos totalmente de acuerdo con  esto. 

No obstante muchas mujeres cometen un gran error al olvidarse de ellas mismas, de perder su esencia como persona, dejan de ser importante para ellas mismas, si bien es cierto que los hijos se convierten en nuestra prioridad, debemos ponernos en el mismo nivel de importancia que ellos, a los hijos se les enseña con el ejemplo, y que mejor ejemplo que una buena autoestima de una persona que se preocupa por su bienestar.  

Porque, por muy difícil que sea reconocerlo y aceptarlo, nuestros hijos crecerán, harán su vida y se irán de casa. A los padres, nos corresponde formarlos con valores, darles una buena educación, prepararlos para ser buenos adultos, ya que nosotros solo somos parte de la escuela de su vida.


Ellos no estarán toda la vida con nosotras, habrá momentos en que nos busquen, que necesiten de nosotras, pero solo será momentáneo, cuando eso pase, las huellas de la edad se notarán sobre nosotras, y se apreciarán aún más si hemos descuidado nuestro aspecto físico, emocional y sentimental, de nuestra pareja, ¿Por qué olvidarse de sentirnos bonitas, atractivas, del gusto de salir, del seguir manteniendo el amor con tu pareja?

Con esto no estoy diciendo que nuestros hijos deban pasar a segundo plano y no nosotras, lo que quiero decir es que, tanto nuestra pareja, hijos y nosotras, debemos estar en el mismo escalón o grado de importancia.

No esperemos a que llegue el momento en que nos quedemos solas y nos demos cuenta de que por dejarnos en segundo o tercer plano, la vida se nos ha pasado, de que fue un error habernos dedicado al 100% en cuerpo y alma a nuestros hijos, olvidándonos de nuestra vida, lo que queremos enfatizar es que como mujer no tienes por qué renunciar a los encantos de la vida, ni que afecte tu relación de pareja. Puedes ser madre amorosa que vive y muere por sus hijos, pero también debes de hacer lo mismo por ti.

Sal en familia, sola con tu pareja o con tus amigas, visita a tus padres, consiéntete, compra esa blusa, ese bolso, esos zapatos que tanto te gustan, ámate, un poco de aire de autosuficiencia no estaría nada mal,  comprende que para que tus hijos estén bien, primero debes estar bien tú.

Eres madre, esposa, hija, hermana, nuera pero sobretodo mujer, una mujer valiosa.

Coméntanos si ya eres madre o aún no y cuál es tu posición frente a tus hijos.

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